Las catas son prácticas para detallar y disfrutar, todas las bondades de sabores, aromas, texturas del chocolate oscuro.
No es sólo una tomar un trozo de Franceschi Chocolate, sino apreciar lo que ofrece.
Con la vista, se aprecia el brillo y tono que varían de acuerdo con la cepa.
El olfato es la forma de apreciar su dulce aroma que evoca la reminiscencia de aquellos momentos donde una taza de chocolate acompañó tus noches frías, o cuando preparabas deliciosos postres en la cocina.
Para el sentido del oído, llevar la tableta muy cerca al costado de tu rostro y escuchar un “crack” se convierte en una invitación cargada de sabor.
Tocar la tableta y sentir su solidez.
Luego el momento esperado, donde la tableta y el gusto se unen suavemente, justo cuando el chocolate cubre el paladar y comienzas a percibir notas de sabores, que varían según la cepa en particular que hayas decidido degustar, y percepción única de cada persona.
Todos somos distintos y las notas de sabor pueden variar.